La patria lejana. Juan Pablo Fusi

         Juan Pablo Fusi está considerado uno de los historiadores más prestigiosos de nuestro país. Quizás menos conocido y menos vendedor que otros colegas suyos de profesión, lo cierto es que en lo que se refiere a prestigio pocos historiadores españoles le superan, buena reputación que, por cierto, ya tenía cuando fue profesor mío hará más de 20 años.

           Así que con estos antecedentes no es de extrañar que este libro a medio camino del ensayo y de la historia me haya resultado de placida lectura y por supuesto muy instructivo.

       He de decir que el nacionalismo es un asunto que me interesa. De siempre, desde que era un niño,  me resultaba incomprensible el gusto que tenían algunos por las banderas. También el localismo siempre me ha llamado mucho la atención e igualmente siempre he pensado que tenía más que compartir con alguien que tuviera mis inquietudes o intereses, que con  una persona con la que lo único que compartía era el haber nacido en la misma ciudad, provincia, CCAA o país. Pero parece que para mucha gente si es importante. Nosotros, y para ser más nosotros necesitamos unos demás con los que diferenciarnos. Y todo por tu lugar de nacimiento. ¿Absurdo? Para mi si. Por cierto, el comportamiento de los hinchas, hablamos de ultras,  del futbol es un fantástico ejemplo. Aparentemente son lo opuesto por las grandes diferencias de origen y por tanto de equipo, pero sus comportamientos son tremendamente similares. Vamos que si un ultra del Madrid hubiera nacido en Barcelona, lo sería del Barcelona, sin duda con todo el pack ideológico (por decir algo) que le acompaña. Nacionalista catalán frente a patriota español. Intercambiables 100 por 100.

         Pero yo no venía a aquí a escribir sobre este asunto de por qué en el XXI y en la rica, riquísima Europa, pese a la crisis, quieren establecer fronteras y diferencias si no a resumir, brevemente, el libro que lo terminé hace unas semanas y que además no lo tengo por aquí. Creo recordar que primeramente nos cuenta que el nacionalismo, más o menos como lo entendemos hoy en día, no es hasta el siglo XIX, en plena transformación social y política frente al Antiguo Régimen, cuando surge. Algunas de sus primeras manifestaciones tienen clara manifestación popular, transformadora e incluso revolucionaria. El nacionalismo que tiene en la Italia de Mazzini a una de sus primeras manifestaciones en cambio va a ir transformándose a lo largo del siglo XIX y del siguiente. Pero el nacionalismo evoluciona tomando unos derroteros más extremistas en el siglo XX. Ya no se trata, al menos en Europa, de esa liberación del yugo de imperios u otro tipo de estructuras estatales propias del Antiguo Régimen, si no que va adquiriendo tomos más radicales, xenófobos, agresivos o simplemente rupturistas y disgregadores. De esa radicalización, poco hay que decir, y que se manifiesta de forma paradigmática con el ascenso al poder del Partido Nacional Socialista alemán. También nos cuenta Fusi, resumimos a toda carrera, que tras la II Guerra Mundial el nacionalismo cae en cierto desprestigio y que justamente son los movimientos unificadores con el ejemplo de la Unión Europea los que ahora predominan. En todo caso con el proceso descolonizador un nuevo nacionalismo liberador se impone en África y Asia. Finalmente y como última etapa nos cuenta el historiador que a se vuelve a producir un resurgimiento de un nuevo nacionalismo en el mundo desarrollado en zonas tales como Escocia, Quebec, o los nacionalismos españoles.

    A destacar las páginas que dedica a hablarnos de fenómenos más concretos como el problema de los Balcanes, causa última de la Primera Guerra Mundial y problema que subsiste durante todo el XX. Otro punto que trata es el del nacionalismo post-colonialista con páginas dedicadas al conflicto palestino israelí, al africano y muy interesantes las que dedica a un asunto que personalmente conocía muy poco y que me ha resulado muy interesante que es proceso de independencia de Argelia que tuvo consecuencias muy dramáticas y que hizo tambalearse a la propia república francesa.

     Para terminar comentar que también trata Fusi otros nacionalismos incluyendo los que tienen que ver con el territorio español y otros europeos. Quizás estas paginas son las que uno lee más rápido por ser asuntos de los que he leído más y que en el caso de  los nacionalismos españoles, más conozco.