domingo, 28 de septiembre de 2014

El mundo de ayer. Stefan Zweig



       Libro casi imprescindible para todo aquel interesado en la historia contemporánea europea y que entienda al conocido como viejo continente como un lugar de encuentro de sus habitantes y no de división. 

       El autor austriaco nos cuenta en una especie de autobiografía, (más bien un compendio de sus recuerdos) como era el mundo, su mundo, antes de que la Primera Guerra Mundial y más tarde el fascismo, lo destruyera casi totalmente. Eso si, no tuvo paciencia. De no haber tomado la decisión de suicidarse junto a su mujer en 1942, se hubiera alegrado de saber que después de la catastrófica II Guerra Mundial en Europa se edificó algo de lo más parecido a un gobierno democrático europeo de la historia.



      Pero este hombre en 1942 estaba deprimido. Como para no estarlo. Judío, hombre de letras, antibelicista y antinacionalista y sobre todo buen burgués, todo lo que le ofrecía los nuevos tiempos no le gustaba mucho. Lógico. Como a cualquier persona sensata. La barbarie se había cebado en su propio mundo, en el corazón del continente en forma de gran guerra primero,  uego más tarde en forma de radicalismos, nacionalismo y persecución a los judíos, para desembocar en la Segunda Guerra Mundial.



       Zweig nos cuenta muchas cosas, por ejemplo, como pasó de ser una persona respetada, un escritor conocido que se codeaba con la intelectualidad de su momento, un burgués de vida placentera y estimulante a convertirse en un apátrida, un perseguido que tenía que vagar por Europa primero y luego atravesar el océano para poder encontrar alguien que le acogiera.  



        Pero esto nos lo cuenta ya al final, anteriormente y por hacer un breve resumen, nos habla de los viejos tiempos, aquí parece que si es cierto aquello de cualquier tiempo pasado fue mejor; nos retrata la Viena de su infancia y juventud, cuando la ciudad no era la capital de un pequeño país sino de todo un imperio. Una época que el la define como de la seguridad. Una seguridad que se trocó con el advenimiento de la Gran Guerra, de la que nos relata en primera persona los días previos con el asesinato de Francisco Fernando, el heredero, en Sarajevo. Nos cuenta magníficamente el ambiente en el que se recibió la noticia, el que conoció Zweig, creo que estaba de vacaciones en alguna paradisiaca playa belga.



       Nos habla igualmente del ambiente bélico que se fue gestando entre las gentes, un fervor guerrero que visto en perspectiva y visto sobre todo con las consecuencias que tuvo, nos deja bastante anonadados y contrasta tremendante con su postura personal de rechazo personal a la guerra, nada bueno va a traer esto, debió de pensar acertadamente y de muchas otras cosas, de los soldados que iban al matadero, de las consecuencias de la guerra, de los riesgos de la revolución, el es un burgués, de la hiperinflación que azotó también a Austria, la famosa es la alemana. Y de muchos acontecimientos históricos.



      Otra parte muy interesante del libro es en el  que nos habla del ambiente intelectual del momento. Retrata una sociedad de antes de la guerra, en Viena, donde había una gran sensibilidad por todo lo cultural, se ve que los deportes todavía no habían quitado el sitio a la cultura. Nos retrata su relación con intelectuales de todo tipo donde creo que destacan los poetas, los dramaturgos y los músicos. Son muchos los personajes del mundo de la ciencia y de la cultura de los que nos habla, por ejemplo Freud.



     En definitiva, no sé si me repito, un libro de los que deja huella, y que tiene una vigencia absoluta. Por cierto, en pleno vuelta de los nacionalismos, tremenda su frase donde habla del comunismos, el nazismo y el nacionalsocialismo como auténticos peligros, nada comparados según el con el nacionalismo, la mayor de las pestes y que pone en peligro la convivencia entre los seres humanos.

viernes, 26 de septiembre de 2014

Castilla habla. Miguel Delibes



       Delibes tenía unas cuantas debilidades. Entre ellas se citaban la caza, el periodismo, el mundo rural, y desde luego su tierra, Castilla. Vallisoletano de nacimiento y veraneante en el norte de Burgos, esté pedigrí castellano se encuentra detrás de este librito escrito en 1983 y que lleva el título de Castilla habla. Se trata de un compendio de pequeños artículos en los que el autor nos retrata la vida y obra de un buen número de castellanos (?), mayormente al norte del Duero. Personas que llevan a cabo oficios que, especialmente con el paso del tiempo, podemos definir como pintorescos. Mujeres que dedican horas y horas a extraer un minúsculo trocito de oro, arrebatándoselo a los ríos del Bierzo (esto no es muy castellano), cazadores de conejos, criadores de caracoles o canarios. También se nos habla de pueblos emprendedores, Iscar for example, de gente de la ciudad que se va al campo o de girasoles. Un poquito de todo como en botica.



    Todo ello, obviamente bien aderezado con la buena pluma (nada que ver con Chueca) de Delibes un tío que escribía tan bien y que supo plasmar el lenguaje más popular, (contra más no paran de decir sus entrevistados), que merecidamente tiene el prestigio que tiene.

Mare Nostrum. Vicente Blasco Ibáñez



         Novela inacabada. Mecachis, y no es que me parezca mala, ni que merezca ningún tipo de deserción lectora, si no que la letra de la edición que tenía era pequeñaja, pequeñaja y para poder terminar las 500 páginas era necesario, imprescindible, que la trama me enganchara de forma tremenda. No ha sido el caso.

        Si, la he abandonado hacia la página 300 cuando parece que el barco del protagonista iba a empezar a dar servicios logísticos a algún submarino alemán (todo ello con la Primera Guerra Mundial y el Mediterráneo, como contexto).

        Hasta esa página y siempre en letra minúscula vamos a seguir los pasos a Ulises, no el héroe griego, si no uno de estirpe valenciana. Pero la coincidencia no es casual. Mare Nostrum es todo un homenaje al Mediterráneo, patria chica de Blasco Ibáñez, mar del que realiza un retrato con mucha admiración. Mucho agua, mucho mar, muchos marineros, muchos peces. Esa es la novela.

        Pd. Aunque he de decir que la culpa de mi deserción ha sido sin duda el tamaño de la letra de la edición, he de decir que quizás esta novela peca de algunos de los principales defectos del realismo, costumbrismo o naturalismo (a elegir): Descripciones, largas, prolijas, a veces se ve crecer la hierba como supuestamente dijo alguna vez Woody Allen refiriéndose al cine europeo.

       Ya ta.

lunes, 22 de septiembre de 2014

En la orilla. Rafael Chirbes



       En la orilla es uno de los mejores libros que he leído últimamente. Lo curioso es que su autor, Rafael Chirbes, era un total desconocido para mi persona, hará un mes. Y no, no se trata de un joven escritor que inicia una fulgurante carrera, “la nueva esperanza de la literatura en castellano”, ni nada de eso. Chirbes tiene ya unos añitos. Debe de andar rascando las setenta castañas. Y una carrera como escritor larga, o al menos, en las solapas del libro podemos leer que es autor de un buen número de novelas.



     Lo cierto es que llegué a este libro de una manera bien particular. Un artículo en El País en el que se hablaba de Lavapiés y de Galdós se citaba al escritor valenciano y a su novela En la orilla y se relacionaba con el Episodio nacional “Las tormentas del 48”, lo que siendo como soy un enfermizo seguidor del escritor canario, me puso en alerta. Indague, indagué y volví a indagar y resultó que esta novela parecía tener muy buena pinta. A saber:



1º Considerada una de las mejores, si no la mejor, del año 2013 por la crítica nacional.



2º. El autor tiene a Galdós como uno de sus referentes



3º La trama, con el telón de fondo de la crisis que padecemos, parecía más que interesante.



Total, me hice con el librito, lo he leído y lo he disfrutado. Además lo recomiendo encarecidamente.



En la orilla es la historia de Esteban, el veterano propietario de una carpintería en una pequeña localidad valenciana. Esteban cuida de su padre, un nonagenario ¿con Alhzeimer? y no le van nada bien las cosas en otros aspectos. A Esteban y al igual que a muchas otras personas la crisis económica le ha salpicado (más bien le ha dejado empapado) y lo que iba a ser un dinero más o menos fácil al albur de la conocida como burbuja inmobiliaria, le ha llevado a la quiebra arrastrado a su vez por un constructor de pocos escrúpulos. Más o menos la trama dice así, de forma más que resumida.



Junto a Esteban otros personajes, que también retratan caracteres de nuestro tiempo, o de cualquier otro. Quizás una de las virtudes, de las muchas, es que los personajes desde luego resultan bien creíbles y muy representativos de la España actual: ancianos, gente aprovechada, inmigrantes, y sobre todo mucho problema y mucho batacazo personal y profesional. Y no nos olvidemos del pasado amoroso de Esteban. Y como no podía faltar en una novela española, referentes a la Guerra Civil.



Fin

El infierno en Tierra Santa. Francisco Medina




       El enésimo conflicto/guerra/enfrentamiento/refriega armado/a entre palestinos y judíos ha provocado de nuevo en mi cabecita ganas de conocer, de entender, de comprender un poco más sobre este asunto realmente enconado y crónico, que tiene, casi o no casi, un siglo de historia.


        Así que con la intención de satisfacer mi curiosidad me hice con este libro, editado por Espasa, (siempre me han parecido una garantía esa colección de libros que editan y que se llaman/llamaban “temas de hoy” o “hoy” a secas) y ya son unos cuantos, algunos comentados en este blog, los que me he leído de esta colección de la editorial. Desconocía por supuesto al autor, Francisco Medina,  al parecer un reportero de guerra de gran experiencia en la zona. El libro desde luego me ha gustado mucho. Se puede decir que ha colmado mis expectativas aunque tal vez esperara una mayor narración histórica.


        El libro, como uno ya se puede imaginar, nos relata el conflicto palestino-israelí desde sus orígenes históricos hasta la actualidad del año 2002 en el que está escrito. En sus capítulos además de la narración histórica del conflicto nos habla de personajes como Arafat y muchos otros líderes árabes. También, aunque menos, de sus correligionarios judíos. Pero también trata, y es quizás lo más destacado de protagonistas anónimos, muy especialmente desde el lado palestino, de esas personas, intenta explicarnos el autor, que ven en la violencia su única salida ante la ocupación israelí de sus territorios. Hombres bomba, terroristas en general, integristas, distintas facciones de resistentes, Al Fatah, Hezbolah, la Yihad, etc. del lado palestino y también colonos judíos, más o menos ortodoxos (radicales para entendernos) y otros mandamases judíos. En fin un repaso más que interesante y muy instructivo.


¿Qué es lo que más me ha gustado?


Muchas cosas, se agradece sin duda la claridad, el tono. En cuanto al contenido, las mejores páginas, sin duda, son en las que relata sus experiencias en la zona, presentándonos a algunos de los personajes claves y sobre todo el sentimiento más popular, mayormente, eso si, desde el punto de vista palestino


¿Qué es lo que menos?


       No puedo decir que haya algo encontrado alguna parte que me haya decepcionado. Tan solo comentar que el punto de vista que aparece mayoritariamente es el palestino. Se echa sin duda en falta mayor presencia de la parte israelí, creo recordar que tan solo aparece el retrato y entrevista de algunos colonos ultra-ortodoxos. Si, sin duda se echa en falta el punto de vista de los israelíes, pero claro esa información, a poca imaginación que tengas, la puedes encontrar en muchos otros lugares. Luego, que cada uno tenga/encuentre su propia opinión.