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martes, 20 de diciembre de 2016

La vuelta al mundo en la Numancia. Benito Pérez Galdós



“Lo que he visto y aprendido es que cuando uno pierde el alma tiene que dar la vuelta al mundo para encontrarla”. Punto final; con esta descomunal frase termina este episodio nacional de Benito “el garbancero”. Un garbancero que escribe esta vez con olor a ceviche peruano. Y es que aunque la frase de marras es evidentemente una metáfora lo cierto es que desmintiendo a Valle Inclán, Galdós se nos muestra más viajero que nunca haciéndonos con la Numancia darnos la vuelta completa al mundo.

Este trigésimo octavo episodio nacional responde como no,  por otro lado,  al arquetipo de cualquier otra obra. Como Woody Allen, Galdós tiene su propio universo, sus propias formas, no se sale de ellas y por tanto nos volvemos a encontrar con una trama histórica, (aventura pseudocolonialista de España en la costa oeste sudamericana) con otra novelesca con nuestro Diego Ansurez (al que creo que conocimos en las celtibéricas tierras de Atienza) muy perdido tras haber visto como su hija decide abandonar a su padre e iniciar su propia vida. Embarcado en la Numancia, Ansurez recupera su viejo oficio marinero y sobre todo tiene la posibilidad de ir en búsqueda de su hija embaucada, piensa el, por un guaperas peruano.

Dentro de la Numancia navegamos, navegamos, llegamos a la costa americana donde asistiremos in situ a la batalla del Callao, quien sabe si origen del nombre de la famosa y ya impersonal plaza del centro de Madrid. No voy a desentrañar más de la historia, a lo mejor es demasiado tarde, tan solo comentar que al igual que sucede en otros episodios (esto es digno de ser analizado/estudiado) la segunda parte de la novela la considero muy superior, especialmente las ultimas 50 páginas.

martes, 19 de agosto de 2014

La revolución de julio. Benito Pérez Galdós



     Cuarta entrega consecutiva de los Episodios nacionales a la que meto mano. Es curioso pero los primeros que leí una vez me hice adicto a Galdós, hará unos 8 o 9 años, los leía de forma aleatoria sin atenerme a un orden. Creo que solo fue desde hace 3 años cuando me propuse, con toda la lógica del mundo, leerlos de forma continuada que yo creo que en el fondo es más recomendable. ¿Adónde quería llegar con esta divagación? Ni idea, no me acuerdo.

Como continuación del anterior “Los duendes de la Camarilla” las primeras páginas de la novela se inicia con el juicio al regicida cura Merino, (segundo cura Merino de fiero comportamiento en este siglo). Impagable el relato de su ejecución,  y muy destacadas las páginas que dedica a mostrarnos las diferentes sensaciones que experimenta el público (pueblo llano, básicamente) presente.


Tenemos a Pepe Fajardo de nuevo como protagonista principal. El Marqués de Beramendi se nos va a mostrar en este capítulo con gran curiosidad y debuta como testigo histórico en la ejecución del cura terrorista.

Otro de los hilos conductores es el de la huida y correspondiente búsqueda de su amiga, fugada de su marido, todo un escándalo en el siglo XIX español que nos recuerda a sociedades actuales más atrasadas, estoy pensando mismamente en nuestras vecinas sociedades musulmanas. En la búsqueda de su amiga y del Ansurez, iremos conociendo también la preparación y final desenlace de la famosa Vicalvarada, una de los muchos alzamientos del siglo en las que las tropas lideradas po el general O´Donnell intentan acabar con el régimen vigente. Una actuación, por los que nos cuenta Galdós, con más sordina que otra cosa.